miércoles, 19 de septiembre de 2007

Scratch

Kendall Payne lleva razón, como Brandi Carlile. Siempre. No sé qué me pasa de nuevo. Será el anhelo éste que tengo, que me hace un nudo en el estómago cada vez que veo tu imagen. No sé de quién son esas miradas que me devuelve el espejo del baño cada vez que paso por delante. Ni me concentro en los días, ni en las noche. Ni duermo, pero tampoco me desvelo. Es cansancio, pero que en el fondo no me disgusta. El aire sigue estando viciado, no sé si de ti, o de mí. Sin embargo, cuando te veo, me siento completamente libre. Es una sensación que pocas veces tengo, y que agradezco. Tal vez, un día cuando me levante, seas tú el que me esté preparando una taza de café, y yo te dé los buenos días. Ese aroma tuyo que vicia mi aire. Quizá sea en un desierto de arena, o en una gran ciudad. Quizá suene la brisa que agite aquellas ventanas del hotel de Amalfi. O quizá el mar, acercándose. Son esos detalles los que anhelo más que mi propia vida quiere tejer una red. Tal vez seas tú el que le tengas que decir a la luna que salga esta noche. O seas tú el que deje los besos en la mesilla de noche cuando me vaya a dormir. No sé qué me das, pero algo es. Algo que me deja perdida en este mar. Scratch...

[Kendall Payne - Scratch]

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